New Hôm Nay

Cada vez estoy mas cerquita de Tibet y ya se va notando.
He pasado la noche en Dali, una precioso pueblo del norte de la
provincia de Yunnan, al ese de China.
Una habitacion individual, sin servicio, me ha costado 3 euros, y no he
buscado mucho.
Ya se pueden ver montanyitas (no tengo acentos ni letra enye ;p) y
gente perteneciente a las minorias que pueblan ciertas zonas de China.
Una cosa curiosa que me ha pasado, es que las mujercitas estas de las
minorias, bastane mayores ellas, y con trajecillos regionales y tal,
se me acercan a ofrecerme marijuana y hachis. Acojonante.
En un ratito me voy en bus a Lijiang que creo que es incluso mejor...

Seguire informando.

No te olvides NUNCA de pedir una tarjeta del hotel, hostal, albergue o agujero fétido en el que estés alojad@.
Es muy útil a la hora de volver porque suele tener la dirección y, en el caso de estar en un país de esos que hablan rarito, puede estar en el idioma del sitio en el que estés.

Esto lo he aprendido a base de olvidarme. Además en China...

Sure enough, its over just as fast as it all began. From the 1st of July I'm going to be a fully registered doctor and my internship days will be well in the past. I'm also going to be unemployed until further notice and I'm actually quite looking forward to it.

Its been an interesting year. It wasn't as hellish as people paint it to be, but it definitely did have many shitty moments embedded within its fabric. Being a bottom feeder is never fun (unless you're a hamour, you'd love that shit if you were.. lying on the bottom of the sea, scooping up whatever falls your way.. which is interesting, the colloquial Bahraini term hamour draws on the size of the fish to describe influential public figures, especially businessmen, while in actuality the hamour is a bottom feeder in the most literal sense of the word). Being the shit-filter, the person that is inundated with stupid requests and showered with mind-numbing clerical work.. it takes you a few weeks to get a hang of it and a few months to totally master it and then you're cruising.

My work experience so far has been that of knowing how to manipulate the system. Sure, I picked up some teaching here and there, but my job has been to facilitate the lives of those more senior than me. The best intern is not the one who knows the most, but the one who makes sure everything is set up for the big boys to come in and make a decision. A demeaning existence were it permanent, but that's why its confined to one year. By the end of this year you've become a bullshit connoisseur, being able to smell it miles away and sidestep it with plenty of time to spare. Now that you know how to play the game, you can start practicing medicine in earnest, with more responsibility gradually being placed on your inexperienced shoulders.

So what have I gotten out of it all? Mainly confidence.. the knowledge that I can deal with any situation no matter how fucked up it is. Sure, you're always learning in life and in medicine.. but it has to go without saying that this abrupt introduction into the real world of hospital medicine has to be the blow that strips the largest layer of innocence and naivety from most of us.

I leave on the 4th of July. After seven years of calling the republic my home, its time for me to move back to where my family reside. I'm anticipating a sizeable enough culture shock, but it doesn't worry me.. I'm more focused on the bliss of unemployment at the moment, even though the regular income will be missed. As I see the new interns come into the hospital to sign their contracts and start moving into our vacated lockers, you can't help but get a tingling down your spine as you remember the beginning.. the very nervy, anxiety-ridden beginning to a year that would go on to shake you to your core.. a year that I've just survived but will forever carry the memory of.

Pues sí, otra nueva sección.
Dos en un mismo día...

Esta vez se llama traveltips (consejos para viajes o algo así).
Intentaré dar algún cosejillo para aquell@s que estéis pensando en daros una vueltecilla por el mundo. son aplicables a casi todo tipo de viajes.

El primero que voy a dar es conocido por todo el mundo y puede resultar simple, pero es muy útil:

Donde fueres haz lo que vieres.

Además es un refrán.

Pues eso, que estés donde estés, fíjate en lo que hacen los locales. Donde comen, donde se alojan, como cruzan las calles, donde compran, qué compran, etc, etc...

Abrazo

Estreno una nueva sección que se llama travelkit.
Voy a enumerar cositas que llevo conmigo y que me han salvado en alguna situación o que me han venido bien en algún momento...

Empiezo con mis queridísimas Croc.




Lo que mejor me ha venido casi de todo lo que llevo encima.

Cuestan un poco caras y son algo feas, por no decir mucho, parece que trabajas en un hospital...
Lo bueno es que no te sudan los piés, los llevas protegidos, son ultraligeras (esto es lo más increible), se secan en segundos, son antibacterias y bla, bla, bla...



Se pueden encontrar falsas (y casi cualquier otra cosa) en el sureste asiático muy, muy baratas.
No se si serán tan buenas, pero al menos cuestan como 20 veces menos.

Las he usado hasta reventar. Para andar por todos sitios, y no han sido pocos... Me he duchado con ellas en algún que otro lugar fétido. Las he llevado para andar por "casa". Me he bañado con ellas cuando estaba en playas peligrosillas.
Las mias están ya más quemadas que la moto de un hippie, por lo menos la suela, así que me he decidido, no con poca pena, a dejarlas de lado, también estaba un poco hartito de verlas todos los días depués de usarlas a saco durante tantos meses... Ahora llevo unas chanclas de lo más cutre, y ya tengo alguna que otra heridilla en los piés.


Los de enmedio son los míos, jeje...

Crocs, nunca os olvidaré...

Pues de aquí a unos poquitos días pienso estar en Shangri La de donde intentaré pasar a Tibet.
Intentaré llegar allí desde Lijiang en China pillando un bus que tarda unas 4 horitas.




Seguiré informando...

Unas fotillos de Guilin.



He pasado tanto calor que no me lo creo todavía, he sudado como en mi vida, ni en Bangkok ni en Singapur ni en España...



Un sitio muy bonito, pero demasiado calor...






Ahora estoy en Kunming muy agusto, con unas amigas muy majas. Ayer me llevaron a una casa de té y aprendí a servir té y toda la historia.

Bastante interesante la experiencia, el único problema es que como me hinché a té no he pegado ojo en toda la noche y me he dedicado a cazar mosquitos, casi termino como el de Apocalypse Now.

En unos días empezaré a subir hacia Tibet. Primero iré a Lijiang, que debe ser uno de los sitios más bonitos de China, luego de allí a Shangri La, que está cerquita de Tibet, y de allí a Lhasa. A ver como se me da la cosa.

Besos...

Anoche estaban echando un episodio de Doraemon en la televisión china y una amiga me preguntó que como se habían encontrado Doraemon y Nobita. Entonces me puse a buscar y encontré el primer episodio.




Lo que pasa es que aquí no sale el encuentro entre Nobita y Doraemon, hay que ir al comic manga para ver como se conocen.

Doraemon fué creado en 1969 por Fujimoto Hiroshi (ya fallecido) y Motoo Akido. Narra las aventuras de un gato robótico enviado desde el futuro para salvar a un niño, Nobita Nobi, de la pobreza en el futuro.

El famoso avión Zero japonés, también conocido como A6M, lo fabricaba la Mitsubishi. El nombre le viene del año en que se empezó a fabricar, en el 2600 (1940 en nuestro calendario) según el antiguo calendario vigente en Japón.





La increible autonomía de este avión se veía eclipsada con su falta de blindaje. Estaba pensado para recorrer grandes distancias y su maniobrabilidad y su facilidad de ascensión dejaba a los viones aliados en pañales pese a sus escasos 950 caballos de potencia.
Más tarde se desarrolló una versión con más blindaje y mejores armas, el A6M5.
Al final de la guerra con Estados Unidos, los últimos pilotos nipones, los únicos capaces de continuar una guerra ya perdida, cargaban el avión de bombas y, en un acto desesperado, se estrellaban contra las naves aliadas. Estos pilotos pasaron a la historia como los kamikazes, "viento divino" nombre que les viene de un tifón que destruyó a la flota mongola que amenazaba con invador Japón en 1570.

Another milestone has quietly passed in Mouse's House. Sam has graduated to the sippy cup at 14 months. Hooray! No more milk being squirted all over the carpet (at least, until he learns to suck the milk in and spit it out his mouth, something all kids seem to try eventually). I'm almost as happy about this turning point as I was about his transition from formula to milk. No more taking bottles apart or putting them together, no more "bottle paraphernalia" cluttering up our kitchen counter or dishwasher baskets, no more scrubbing nipples with a tiny brush to get the encrusted goop out.

Still, there was a pang as I packed up the bottles and bottle warmer. My baby is growing up and doing it fast! Next thing you know, I'll be sighing with relief when he's out of diapers - but already missing (and forgetting) all the cute things he does now - his babbling, his bow-legged baby gait, and the way he throws his hands in the air when we say "Yay, Sam!" Good thing I have a brand new niece to dote on. She's cuddly, softer than silk, light as a feather and exudes that new-baby smell. Another whole "first year" to observe and marvel at.

Ya podéis poner kalibushi.com en vuentros navegadores que ellos solitos os llevarán aquí.
He registrado el dominio para que quede más mono que todo el tocho ese de blogspot y tal...

Mañana me esperan 40 horas de tren, me encantan los trenes, pero esto quizá sea pasarse.
Que Buda me pille confesado.

Abrazo

Hace poco, Javi Kobe, un Sevillano que vive en Japón y co-lleva el excelente blog Motomachicake, escribió un artículo sobre mí y sobre El Camino Del Bushi.
He de decir que gracias a este artículo he recuperado las energias, un poco aparcadas, de escribir en mi blog y postear más a menudo.




Vito, como se hace llamar Javi, escribe en su blog junto con Yito, una japonesita de Kukatsu.
Desde luego que su blog no tiene desperdicio, las fotografías son geniales y la manera de escribir denotan la madurez, simplicidad y buen gusto de esta pareja a la que tengo ganas de conocer en cuanto llegue a Japón, de aquí a dentro de un mesecito, semana arriba o semana abajo.
Solo hace falta ver lo chulo que es su banner para hacerse una idea de lo que se puede esperar.
Posts muy cálidos, con toques de morriña por doquier.
Joder, parezco un catador de vinos usando adjetivos horteras...

Motomachicake junto con el de Kirai son los únicos blogs que sigo (Wallias, no puedo acceder a tu página).
Tengo ganas de tener más tiempo para investigar un poco la blogosfera y encontrar algún otro blog interesante.

Nos vemos pronto Vito y Yito.

Echad un ojo a la tiendita eBushi.


La lleva Juanma , el de Bushi-Comics y tiene una barbaridad de comics y de alguna cosilla que he enviado desde Asia. Las camisetas se salen. Yo me he pillado unas cuantas para mí..., bueno, algo más que unas cuantas, y sino que se lo digan a mis padres que están flipando con las cajas de ropa que les he acoplado en Madrid...


Abrazo

Unos carteles muy chulos de la guerra civil en Auckland, Nueva Zelanda.








































Una exposición muy inesperada estando donde estaba, en las antillas de España.

Y ahora un cartel de la Commonwealth:

Pues estando en Perth, Western Australia, conocí a un francés que tenia un problema con su tarjeta de crédito y no podía sacar hasta después de semana santa que era cuando abrían los bancos. El pobre no tenía ni para comer. Entonces me ofrecí a prestarle dinero aun sabiendo que no me lo podría devolver porque yo me marchaba de Perth al día siguiente dirección Melbourne.

Me decía, “¿Cómo te lo voy a devolver?”, y yo decía “Tranqui, sin problemas…”. Entonces el me miró pensativo y dijo “Espera un momento”. Hizo una llamada y me dijo “Cuando llegues a Melbourne llama a este número y un amigo mío te dará mi tabla de surf que la dejé en su coche porque no podía viajar con ella”. Y así hice. Al poco de llegar a Melbourne y asentarme llamé a su amigo alemán y voilá…

Mi primera tabla de surf. Mírame que salao que estoy con ella al lado de la furgo de Patro y Ripi.

No la llegué a usar, pero eso es otra historia...

Besos desde el lejano oriente.

As I mentioned before, I've been reading this book about Mother Theresa and the Missionaries of Charity (Mother Theresa: A Simple Path). One thing that strikes me about them is their lack of the need to control those they serve. As the sisters explain in the book, at Calcutta's home for the dying, they don't try to convert the people who come to them for help. They provide Hindus and Muslims with burial services and practices that are consistent with those traditions. Basically, they let their actions speak for themselves. "Results" - whether measured in terms of numbers converted or saved from drug addiction or healed of disease or whatever - are not emphasized nearly as much as "process". As the sign on the wall of one of their Calcutta homes says, "It is not how much you do, but the love you put into the doing that matters."

I was thinking about this kind of "love in action" as I pulled into the parking lot of Barnes and Noble on Sunday. A middle-aged man with sandy hair, glasses and a plaid shirt waved me down and asked me if I could spare any change. I don't know about other cities, but I've noticed that in Salt Lake the new story is always that the money is needed for gas. They are passing through town, they ran out of gas, they just need money for gas and they will be on their way. In fact, every time I've been approached in a parking lot in the past few years, this is the story. Anyway, all the reasons not to give money to this man went through my head. "Maybe he's lying about needing gas. He will use it for drugs or alcohol. My money won't do anything for him. It won't change him or get him a job or whatever he needs. Why should I give him my hard-earned money? If I give him money it will just encourage him to keep preying on kindhearted strangers in parking lots." Etc., etc.

But here he was, asking me for help. Another voice spoke in my mind. "Give to him who asks of you, and to him who would borrow from you, do not turn away." I imagined Mother Theresa and the missionaries, who give away everything that comes to them and make it a point not to turn anyone away who comes to them for help. There is a freedom in that. I don't need to know the history of the one in need, or the outcome of any gift I give. As Momma T. said, "We are not called to be successful, but we are always called to be faithful." I gave the man some money. Maybe I'm a sucker, but in some way it is hard to describe, it was more satisfying to know I gave something away than to listen to all the reasons not to. Maybe this is part of the meaning of "It is more blessed to give than to receive."

Lo primero para ir a ver a los guerreros de terracota y lo más importante es estar en Sian.
Lo segundo es pasar de los apestosos tours que te ofrecen en los hoteles o agencias. (Consejo: evita los tours organizados donde sea que viajes, apestan).
Tercero, irte a la parada del bus 306 enfrente de la estación de autobuses.



Son unos autobuses verdes viejitos. Te subes bajo la atenta mirada de los demás pasajeros y del conductor (de seguro que eres el primer guiri que ven en el autobús en siglos), te sientas y esperas a que decida irse, una vez en marcha pasará alguien vendiendo tickets, son 7 yuanes, o.70 euros.
Sabrás cuando has llegado, unos 3 cuartos de hora más tarde. Ahora solo queda pagar la entrada para ver a los guerreros, 90 yuanes y listo. Cuando termines vuelve a la parada de autobuses y para casa.
¿Qué te has ahorrado?
Pues bastante dinero, que te lleven en el tour a ver mil tiendas que no has pedido ir a ver para que compres mierdas, que te lleven por donde ellos quieran como si estuvieses en el cole.
Y ganas poderlos ver en el orden que te venga en gana sin tener que esperar a nadie, sin ver las tiendas del infierno, sin escuchar al guia de turno y con la satisfacción de haberlo organizado todo tu mismo sin ayuda de nadie. Muy facil.




















Unos estudiantes posando para la orla.












Un simpático vendedor de periódicos que me pidió que le hiciese fotos...

Pero que pedazo de animal es este hombre.

Llegas a la estación de tren y eres el único occidental de entre unas tres mil o cuatro mil personas que se aglomeran esperando la salida de sus respectivos trenes. Todo el mundo si excepción te mira. Eres un bicho raro, pero no hay miradas de reproche o desprecio, es pura curiosidad. Tras ingeniártelas hasta encontrar la puerta de embarque y la sala de espera que te corresponde (se acabaron los bonitos letreros en Inglés, ahora lo único que reconoces son números) en la que, por supuesto, hay unas mil personas más, decides esperar hasta que llegue la hora de pasar por la puerta de embarque.

Comienzan a formarse lo que parecen ser colas de gente enfrente de las puertas.

Esperas cerca de media hora hasta que se abren. Te vale ir con cuidado o como te hagas de rogar vas a acabar el último, ya no rigen las normas de educación a las que estás acostumbrado en Inglaterra, que va, aquí si te descuidas no entras. El que puede se te cuela por la tangente, y a los demás parece no importarles, debe considerarse un castigo merecido por tu falta de atención. Imagino que con los negocios pasará algo parecido, por lo que he oido de algunos estranjeros que estan aquí haciendo 'business'. Como no te andes con ojo te la cuelan.

Llegas al tren, ni siquiera te paras a contar los vagones porque no te da la vista para tanto, pero sabes por experiencia de otras veces que deben rondar los 20 ó 30.

Le muestras tu billete a quien ves de uniforme para que te indiquen. Tu cara de extranjero es todo lo que necesitan para ni molestarse en explicarte nada, se limitan a señalar la dirección en la que tienes que ir para llegar a tu vagón.

Al ser un país comunista, no existen las distintas clases, aunque eso se queda en el tintero, porque va mucha diferencia de un tipo de asiento a otro. Se separan en asientos y en camas, dentro de cada tipo hay duro y blando. Por ejemplo, yo viajo en (hard sleeper) “cama dura” es la clase más barata de camas, cada compartimiento son dos columnas de literas con tres camas cada una, nada las separa del pasillo. Yo estoy en la de arriba, que me parecía un poco más independiente que las demás. Aunque aquí no se considere una maravilla porque es la más barata, la cama más cara es la de en medio, y la de arriba y la de abajo cuestan algo menos. Las diferencias de precios son muy pequeñas, unos céntimos de euro más o menos. Pero es curioso.

Llega la hora de comer algo, así que elijo un sentido y me pongo a caminar hasta que llegue al vagón restaurante. Hacia la derecha no se puede seguir, he topado con una puerta cerrada con un letrero en Chino, media vuelta. No se los vagones que paso bajo la mirada atenta de toda aquella persona que se cruza en mi camino, pero por fin llego.

Me siento en una de las mesitas, por supuesto TODO el mundo me está mirando, ni falta hace decir que soy el único extranjero en todo el tren, me cuesta reprimir una sonrisa, no me acabo a acostumbrar a sentirme como una estrella.

Una camarera le pasa un menú a una pareja de hombres cerca mío, espero a que terminen de pedir para hacerle una señal pidiéndole la carta. Cuando la abro veo que solo está en chino, no me sorprendo. Por suerte hay un par de fotos por página, señalo una de unos “dumpling” (especie de empanadillas chinas hervidas o al vapor rellenas de vegetales y carne de cerdo), me dice que no, así que me decido a ir a suertes y señalo un plato cualquiera que no sea ni muy caro ni muy barato a ver que pasa.

Al rato, un camarero se acerca con algo que no tiene muy buena pinta, ruego que no sea lo que yo he pedido, por suerte pasa de largo. Al rato la misma mujer me trae un plato de vegetales con carne y un cuenco de arroz blanco. Esta vez he tenido suerte. Apunto mi dedo a una botella de té verde que veo en una vitrina. Al poco me la traen, no merece la pena el esfuerzo de intentar explicar que la quiero fría. Estoy satisfecho.La siguiente vez no tendre tanta suerte.

Mañana a cierta hora, todavía no se lo que dura el viaje, estaré en Sian preparado para ver uno de los descubrimientos arqueológicos más importantes de la historia, los guerreros de terracota, y ya de paso iré a ver la presa de las tres gargantas. Habrá merecido la pena.

Un saludo.

Pues eso, que en cosa de una semanita aparezco en Tibet y luego a Nepal.
Tango unas ganas que no me lo creo, a ver si veo el Everest o el Anapurna.

De momento estoy en China, en Hangzhou un sitio precioso con un lago lindisimo.

Abrazos y nos leemos pronto.

The Pixies, Where is my mind.



Te dicen que hay un megaconcierto en una zona cerca de Perth, Australia y que actuan los Pixies.
Te vas para allí sin muchas esperanzas una hora antes de que actuen ellos, por supuesto son los últimos del festival.
Esperas fuera de la zona de concierto por no pagar los 100 dólares que cuesta la entrada. Cuando empieza todo alguien te regala una entrada.
Entras y a gozar...









Se lo dedico a un coleguilla de Brighton que le encantan los Pixies y del que me acordé mucho mientras estaba allí. Va por tí Parleño.

Hay una calle en Hong Kong donde tienen una placa en el suelo por cada gran estrella de cine de hong Kong. Y ha habido grandes estrella.
Sino mirad las que salen en las fotos.



Bruce Lee




Jackie Chan



Jackie otra vez.

Dos de los artistas que más respeto.

El amigo Bruce tiene incluso una estatua desde la cual se puede ver la bahía de Hong Kong.







Mis respetos.

Hola a todo el mundo.


Pues sí, ya hace 7 meses que dejé mi casa, trabajo, etc., para viajar.
Después de haber estado viviendo y trabajando en Brighton, UK durante 5 años, no me resultó facil dejarlo todo, pero lo hice. La verdad es que estaba mejor que nunca, eso es lo que me hizo decidirme, porque si no lo hacía ahora, nunca lo haría.


Great Ocean Road, Australia.

Así que empaqueté, regalé o vendí mis cosas y un amiguete se metió en mi habitación. Di el aviso en el trabajo y a buscar un billetito para Madrid, donde pasé 5 semanitas de lo más rico, en parte por la comida :P


Melbourne, Australia

No es que sea millonario ni me haya tocado la lotería, no. He estado guardando algo de dinero cada mes para realizar mi sueño de ver el mundo. Me voy a gastar en total bastante menos de lo que se gasta mucha gente en su coche. La vida no es tan cara fuera de Europa Occidental como creemos. Además he pasado la mayor parte del tiempo en países asiáticos, donde todo es mucho más barato que en España, y para que decir que muchísimo más barato que en Inglaterra.


El palacio de Bangkok
Por ejemplo, en Vietnam, una habitación en un hotel con dos camas sencillas, servicio de limpieza diario, sábanas limpias cada día, aire acondicionado, y aseo con ducha o bañera incluida te puede costar unos 6 dólares la noche. La relación calidad precio es exagerada.
La comida tiene un precio parecido.
No todos los sitios son tan baratos, he puesto el ejemplo de Vietnam porque es de lo más baratito, pero no todo es así, ni los precios están relacionados. Puede que llegues a un lugar donde la comida es barata, pero el alojamiento no o viceversa.


Unas figuritas vigilando el palacio.

Pero por lo general en países occidentales los precios suelen ser más caros por cosas que no tienen porque ser mejores. Sirva de ejemplo Australia, donde el alojamiento es mucho más caro que en Vietnam y las calidades no son mejores.
Ojo, he estado en sitios muy chulos en Australia también. Y sitios muy cutres en Vietnam…



Una cosa curiosa que te pasa cuando viajas tanto y durante tanto tiempo seguido es que te das cuenta de lo fácil que es viajar comparado con cómo se ve desde casa. Una vez das el salto y te decides, cualquier sitio parece un paseo a la vuelta de la esquina.
Hace un par de día estaba con un amigo en un taxi por Beijing hablando sin prestar atención a la ciudad cuando de repente nos dimos cuenta de que estábamos pasando por unos de los lugares más importantes del mundo, la plaza de Tianamen.



Al día siguiente fuimos a hacer las fotos de turno y a turistear un poco. Pero sí es verdad que muchas cosas que nos deberían llamar la atención de manera inmediata nos pasan un poco desapercibidas.


¿Veis como fui?

La gente me pregunta si no estoy cansado de viajar y echo de menos estar en mi casa, pues hombre, sí, ¿cómo no?, lo que pasa es que cada día te enfrentas a algo nuevo y la incertidumbre te tiene distraido lo suficiente como para no pensar en otras cosas. Además te puedes sentir como en casa en cualquier lado. El mundo está ya muy “globalizado” y se deja viajar. Además, en cualquier lado puedes encontrar un “Youth Hostel” (Albergues de la Juventud), “Guesthouse” (Casa de huéspedes) o “Backpacker” (la traducción literal es mochileros, se usa como los Youth Hostels) donde se junta un montón de gente como tú que están solos viajando por el mundo y donde es fácil hacer amigos y compartir experiencias.




La comida es una de las mejores cosas...



o de las peores...


No preguntes...

Lo que pasa es que estamos acostumbrados a un nivel de calidad tremendo, y cuando viajamos no encontramos la comida tan fresca como en casa o la higiene deja bastante que desear, pero cada lugar tiene algo que ofrecer y para mí es una de las cosas que más me gustan de viajar, comer cosas diferentes de cada lugar donde voy.


Escorpiones, gusanos, santamontes y otras delicias...

He comido cosas que van a estar entre mis platos favoritos por mucho tiempo.

Podría enrollarme hasta reventar, pero lo mejor será que si alguien quiere saber algo en específico o algún consejo que escriba la pregunta en los comentarios y la intentaré contestar lo mejor posible.

Abrazo desde Shanghai

k